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* Un grupo compuesto por 99 familias del sector San José de la comuna de Ninhue están viendo incrementada su calidad de vida merced a un proyecto de investigación agrícola suscrito por los Gobiernos de Chile y Japón.
(Santiago, 20/06/2002, Agencia Minagri): En su tercer año de operación (de un total de cinco) el proyecto CADEPA (Conservación del Medio Ambiente y Desarrollo Rural Participativo en el Secano Mediterráneo de Chile) ha involucrado a 17 investigadores japoneses (5 permanentes y 12 de corto plazo) y a 15 chilenos, todos los cuales tienen como objetivo final la mejora integral del sector (microcuenca San José) y de sus habitantes.
Para el investigador Claudio Pérez, administrador del proyecto, resulta muy loable que se haya escogido a Ninhue como área de trabajo, toda vez que esta comuna reúne las condiciones deseadas para lo que ha sido denominado un ambicioso proyecto.
Pérez sostiene que las características agroclimáticas de la zona constituyen un gran reto, toda vez que las lluvias se concentran entre mayo y septiembre (condiciones de secano), los suelos presentan avanzados índices de erosión y baja fertilidad, lo que se traduce en baja producción agrícola y altos índices de pobreza. «Este panorama es posible de revertir -indica- si para ello se destina el trabajo de los investigadores, tecnología agrícola conservacionista y la educación de los agricultores».
«Es importante que los propios productores entiendan lo que estamos haciendo y que reviertan antiguas prácticas agrícolas que ya no son económicamente rentables y, peor que eso, son grandes causantes de la erosión que los afecta». «En tal sentido -agregó- un papel preponderante le cabe a la Municipalidad de Ninhue y a la Junta de Vecinos del sector, quienes son los llamados naturales a organizar a los agricultores para incorporar nuevas tecnologías productivas».
El Proyecto CADEPA
El proyecto CADEPA incorpora el concepto de manejo integral de microcuenca (pequeña zona geográfica hacia donde escurren todos los cursos de agua compartiendo una salida común) y la participación de los propios agricultores como ejes fundamentales para mejorarles la calidad de vida. Un fuerte énfasis está dado al aumento de la producción, basados en labores de recuperación y conservación del medio ambiente.
Para ello, los investigadores del Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA Quilamapu) y del Ministerio de Agricultura, Pesca y Forestal del Japón (MAFF), coordinado por la Agencia Japonesa de Cooperación Internacional (JICA) han destinado tecnología de punta y un acucioso trabajo para cumplir con las etapas previstas.
Líneas de trabajo
El proyecto CADEPA se sustenta en la investigación (prospecciones de recursos hídricos, fertilidad, y pérdidas de suelos y nutrientes producto de la erosión hídrica), la elaboración de planes adecuados para el desarrollo rural a pequeña escala y en el desarrollo de los habitantes de la Microcuenca San José.
El investigador de INIA Quilamapu, Claudio Pérez, indicó que la promoción de nuevas prácticas conservacionistas de suelo y agua son fundamentales. Así, la eliminación del barbecho (que disminuye el índice de erosión) y el tener siempre una cobertura vegetal sobre la tierra mejoran la estructura del suelo, aumentando la infiltración del agua. «Con ello se aumenta la capacidad de recarga de los acuíferos y los productores pueden obtener más agua de las norias y vertientes, con lo que se empieza a solucionar uno de los más graves problemas de la microcuenca que es la escasez de agua en los meses de verano».
Pérez señaló que hasta el momento el Proyecto CADEPA ha introducido nuevas modalidades de cultivo para el sector, obteniéndose rendimientos de trigo promedio de 32,4 quintales por hectárea, muy superior a los 14 quintales de promedio en toda la comuna. Del mismo modo, se ha logrado reducir de 18 a 7 meses el periodo de inicio de preparación de suelo para la siembra y cosecha de este cereal.
El investigador agregó que en dos años se ha logrado que los productores incorporen los nuevos conceptos de prácticas conservacionistas de suelo y agua. Asimismo, resaltó el hecho que empiecen a visualizar lo nocivo que resulta la práctica del barbecho. «Lo que falta ahora es incorporar la idea del manejo integral de microcuenca, para lo cual deben involucrarse todos los habitantes de esa unidad geográfica».
Finalmente, expresó que también se busca mejorar las capacidades de comercialización de los agricultores, lo que pasa por otorgarle algún valor agregado a los productos, y buscar alternativas de comercialización para los mismos. Todo ello tendiente a mejorar los ingresos de las familias.
Ficha técnica
Ninhue se ubica a 50 km al noreste de Chillán. Según el último censo agropecuario, de las 1023 explotaciones agrícolas de la comuna, el 24% pertenece a agricultores de subsistencia y el 75% a pequeños empresarios. Estos dos estratos de productores tienen el 58% de la tierra agrícola. Los principales cultivos son el trigo, las leguminosas de grano y las viñas (que pasan por un muy mal momento económico).
Las lluvias promedian los 650 milímetros al año, concentrándose entre mayo y septiembre. Caracterizado por la presencia abundante de cerros, los suelos se presentan muy erosionados. Debido a ello, éstos presentan bajos índices de fertilidad, bajos niveles productivos y, por lo tanto, bajos ingresos de sus habitantes. La disponibilidad de agua para riego en verano es prácticamente nula. Los estudios indican que la extracción de aguas subterráneas es económicamente inviable. La alternativa es cosechar aguas superficiales. Se estudia la forma de hacerlo.
Instituto de Investigaciones Agropecuarias – INIA
