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En un seminario realizado por el Banco del Estado y ODEPA, los clientes pequeños empresarios del segmento agrícola conocieron los principales desafíos y proyecciones que involucra la generación de nuevos negocios con Japón, China e India.
Según un informe elaborado por la FAO, Chile ocupa el puesto 17° a nivel mundial y tercero en Latinoamérica entre los principales exportadores de alimentos. Así quedó establecido en el seminario «Perspectivas de exportaciones agrícolas a los mercados de Asia», que el Banco del Estado realizó en conjunto con el Ministerio de Agricultura y la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa), con el propósito de entregar información de primera línea a sus clientes pequeños empresarios exportadores, interesados en realizar negocios en esos mercados.
Al encuentro asistieron como expositores los agregados agrícolas de Chile asentados en India, Japón y China, Gonzalo Ibáñez, Sacha Garafulic y Juan Enrique Moya, respectivamente, quienes coincidieron en que estas economías han exhibido las más importantes tasas de crecimiento de la región asiática y concentran una alta proporción de la población mundial, lo que los convierte en mercados tremendamente atractivos para la exportación de productos alimenticios.
Ricardo Auad, gerente de Pequeña Empresa de BancoEstado, destacó que «estos países experimentan un proceso económico dinámico y vigoroso, proyectado a largo plazo, lo que presenta un gran atractivo para las exportaciones de nuestros clientes empresarios exportadores. Es por eso que queremos acompañarlos en este camino lleno de nuevas oportunidades de negocio y este seminario se enmarca justamente en nuestro propósito de entregarles soluciones financieras y no financieras, como el acceso a información relevante para la toma de decisiones».
Para Gonzalo Ibáñez, agregado agrícola de Chile en la India, el foco de interés para los empresarios chilenos no sólo debe concentrarse en la India, país con el cual ya se negoció un acuerdo de libre comercio, sino también en países aledaños, como Irán, Bangladesh, Pakistán, Bután y Turquía, que constituyen un puente entre oriente y occidente. «Toda la región muestra un gran potencial para la generación de nuevos negocios, y nuestro desafío al respecto es incrementar los envíos al Asia, que en la actualidad representan el 36,6% de nuestras exportaciones», indicó.
En cuanto a nuestras relaciones comerciales con Japón, la segunda potencia económica del mundo, nuestro agregado agrícola, Sacha Garafulic, destacó que este país es destino del 11% de nuestras exportaciones totales. Esta situación mejoró considerablemente luego de que en septiembre de 2007 entrara en vigencia el TLC suscrito con ellos.
Para Garafulic hay condiciones claves que nuestros exportadores de alimentos deben tener en cuenta: «sólo el 13% de las tierras de Japón son aptas para la agricultura; su capacidad de autosuficiencia alimentaria alcanza sólo al 40% y Chile ocupa el octavo lugar entre los países exportadores, lo que debemos potenciar, aprovechando las oportunidades dadas por las condiciones geográficas de Japón».
Los desafíos frente a la gigante asiática China, apuntan a incrementar el 1% de las exportaciones dirigidas al país más poblado del mundo, por la vía de utilizar todas las cuotas establecidas en el Tratado de Libre Comercio firmado en el año 2006. «La occidentalización de la dieta de los chinos representa una oportunidad para aumentar los envíos de frutas, lácteos, carnes de ave y de cerdo, que son nuestros principales productos exportables y que generan 102 millones de dólares en exportaciones a China», señaló Juan Enrique Moya Suárez, agregado agrícola en ese país.
Fuente: Banco Estado
