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Dinámica productiva y comercial
Maíz: a la espera de una mejora en los precios
Marcelo Muñoz Villagrán
El consumo aparente de maíz en Chile entre los años 2000 y 2007 fue en permanente aumento, siguiendo la misma tendencia que tenía la producción de carnes de aves y de cerdos en el país (figura 1). Es así como pasó de 1.822.806 toneladas en el año 2000 a 3.053.605 toneladas en el año 2006, cifra que prácticamente se mantuvo en 2007.
En el año 2008 las curvas se separaron, disminuyendo el consumo aparente de maíz mientras que la producción de carne de aves y cerdos aumentó. La baja de 329.522 toneladas en el consumo aparente de maíz en 2008, que lo situó en 2.731.162 toneladas, se debió probablemente al aumento en el precio de este grano, que provocó un reemplazo por otros productos, entre ellos el grano de sorgo, cuyas importaciones aumentaron de 130.595 a 313.357 toneladas entre 2007 y 2008. Puede citarse también el aumento de aproximadamente 40.000 toneladas de maíz partido.
En lo que va de 2009 las cifras indican que se repetiría la tendencia de 2008: la importación de maiz entre enero y mayo fue la mitad de lo que se importó en el mismo período del año anterior (tabla 1).
Las importaciones de sorgo entre enero y mayo de 2008 y el mismo período de 2009 tuvieron un fuerte aumento, pasando de 10.659 a 169.876 toneladas. En el caso del maíz partido, también han aumentado y ya superan las 25.000 toneladas.
Los precios internacionales y este eventual reemplazo por productos suplementarios, ponen un techo al precio pagado al productor de maíz nacional. La concentración de la producción y su puesta inmediata en el mercado provocan que la tendencia de precios nacional en el período de cosecha se divorcie de la tendencia internacional.
Entre mediados de marzo y mediados de junio el precio internacional promedio semanal por tonelada del maíz amarillo pasó de US$ 159,4 FOB puerto argentino a US$ 192,80, denotando un alza de 21%, y el maíz Yellow N° 2, FOB Golfo, EE.UU. pasó en ese mismo período de US$ 168,02 a US$ 194,47 por tonelada, con un alza de 16%.
El precio pagado a productor nacional en este período, en cambio, cayó en 15%, pasando de US$ 214,13 a US$ 181,78 por tonelada. Más aún, a partir de mediados de mayo el maíz en Chile llegó a cotizarse por debajo del precio pagado por el maíz argentino puesto en ese país (figura 2).
De acuerdo al informe de junio de 2009 del World Agricultural Supply and Demand Estimates (WASDE) del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA), se estima que la producción mundial de maíz habría disminuido en 4,33 millones de toneladas en la temporada 2008/09. Según la proyección para la temporada 2009/10, esta producción volvería a disminuir, esta vez en 5,81 millones de toneladas, 3,68 millones de toneladas menos que lo proyectado el mes pasado, cayendo por debajo del consumo mundial proyectado del grano (figura 3).
Estos pronósticos permiten mantener una visión optimista con respecto a los precios de los futuros del maíz en Chicago. A mediados de mayo los precios para las distintas posiciones iban desde US$ 164,24 para julio hasta US$ 176,76 para marzo de 2010, con un aumento de US$ 12,52, mientras que a mediados de junio el precio subía de US$ 167,47 a US$ 180,86 para las mismas posiciones, con un alza de US$ 13,39 (tabla 2)
Terminado el período de cosecha del maíz nacional y su efecto sobre los precios nacionales, éstos deberían retornar a su correlación histórica con el precio internacional. Ello entrega una luz de esperanza para aquellos agricultores que pudieron y se atrevieron a guardar su grano a la espera de mejores precios.
Como apoyo a estos agricultores que al 31 de mayo tenían su maíz almacenado, el Ministerio de Agricultura creó un programa de guarda de maíz en el cual el gobierno financia el almacenaje por los próximos tres meses con un máximo de 2.000 quintales por agricultor, programa que favorecería a más de 430 productores. A los pocos que a esa fecha aún no habían cosechado, el programa les permite almacenar por hasta cinco meses, cancelando un total de $ 400 por quintal. Para acceder a estos beneficios los productores agrícolas deben inscribirse en los silos de las empresas Coagra, Copeval, Agrosilos y Cotrisa de las regiones de O§Higgins, del Maule y del Bío Bío.
Frutas
Jaime Bravo Mina
Las exportaciones de fruta chilena en sus diversas formas han experimentado un pequeño aumento en volumen durante los primeros cinco meses del año 2009 en comparación con el mismo período de 2008. Sin embargo, el valor preliminar de las exportaciones muestra un serio deterioro durante el período bajo análisis. El precio medio de exportación en dólares de los distintos subsectores sufrió bajas significativas durante este período, lo que podría modificarse en parte por los informes de variación de valor, una vez que se hagan las liquidaciones definitivas.
En fruta fresca, las especies que mostraron mayor crecimiento en volumen exportado en el período fueron los arándanos (22,8%), los kiwis (14,8%), las ciruelas (10,1%) y la uva de mesa (4,3%). Por su parte, las frambuesas sufrieron la mayor caída (66,6%), seguidas por las cerezas (49,6%), las paltas (34,6%), los duraznos (10,2%) y los nectarines (5,4%). Las variaciones experimentadas por los cítricos en este período son irrelevantes, ya que su temporada se inicia con fuerza a partir de julio.
En cuanto a precios, la uva de mesa, que representa más de 50% del valor de las exportaciones de fruta fresca, ya casi terminada su temporada, ha tenido un comportamiento dispar, dependiendo de su mercado de destino. En el mercado de Estados Unidos la uva chilena se encontró con un mercado muy abastecido con fruta de California y Brasil. De acuerdo a fuentes del sector privado, el precio de la variedad Crimson Seedless fue un 12% mayor que en el año pasado; sin embargo, la Thompson Seedless y la Red Globe obtuvieron 9% y 7% menos, respectivamente. En Europa la situación fue muy negativa en cuanto a precios, debido a la caída en el consumo por la crisis económica y la fortaleza del dólar con respecto al euro, con disminuciones de 14%, 24% y 33% para las variedades bajo análisis en este período. Esto se compensa, al menos parcialmente, por una diferencia en la tasa de cambio, que habría favorecido principalmente a los anticipos expresados en dólares. La evolución reciente del valor del dólar y la posibilidad de que persista un menor nivel en los meses venideros introduce dudas sobre el resultado económico de las exportaciones en la parte del valor de venta que está todavía por liquidar, si no se tomaron oportunamente medidas para asegurar el valor de la divisa.
La aparición de la Lobesia botrana en el país hizo temer al inicio de la temporada que los principales mercados de exportación impusieran restricciones a la entrada de la uva de mesa chilen
a. Sin embargo, la reacción en los mercados externos no fue negativa, ya que la mayoría de éstos no establecieron restricciones fitosanitarias específicas en relación a la Lobesia. En particular, el mercado de Estados Unidos, el más relevante y que importa más del 50% de la uva de mesa chilena, no se vio afectado, ya que la fruta es fumigada con bromuro de metilo en forma previa a la entrada, tratamiento que es considerado adecuado por las autoridades fitosanitarias de ese país. En Europa la Lobesia está presente, al igual que en países asiáticos como Japón, razón por la cual las autoridades de esos países no impusieron restricciones ni prohibiciones a raíz de este factor.
Sin embargo, México prohibió la entrada de uva de mesa chilena proveniente de huertos positivos a Lobesia, al no aceptar el tratamiento con bromuro de metilo como suficiente y eficaz para eliminar el problema. Según estimaciones del sector exportador, esta prohibición habría significado una disminución de 20% en el volumen de exportaciones de uva de mesa al mercado mexicano.
En el plano interno, la aparición de la Lobesia obligó al SAG a establecer ciertos requisitos cuarentenarios y de aplicaciones de productos, dentro de su programa de erradicación de esta plaga. Los productores de uva de mesa se vieron enfrentados a tener que ampliar el nivel de aplicaciones que normalmente realizan, para tener una condición fitosanitaria adecuada de la fruta y poder así acceder a los mercados externos.
La situación de baja de precios en dólares con respecto al año anterior se dio también en las otras especies que generan los mayores ingresos por exportaciones de fruta fresca, siendo afectadas por esta situación las manzanas, que tuvieron que enfrentar la existencia de altos volúmenes de fruta local en Europa y Estados Unidos y una demanda restringida. Situación similar ocurrió con los kiwis, con fuerte competencia de fruta italiana, y las cerezas, que al inicio de la temporada tuvieron precios muy altos que provocaron una fuerte contracción de la demanda, con efectos de fuerte caída posterior.
Las paltas registraron precios de exportación similares durante los períodos comparados de análisis. Sin embargo, la temporada que se inicia se presenta compleja, puesto que Chile volverá a los niveles normales de producción, lo que implicará un potencial de exportación equivalente al doble de lo exportado en la temporada pasada. Al aumento de producción y exportación local deben agregarse la irrupción cada vez más voluminosa de Perú y los altos volúmenes que México, el mayor productor mundial, tendrá disponibles para esta temporada. La suma de estos factores hace prever una importante caída de precios para la palta, tanto internos como de exportación.
La aparición de ejemplares de Mosca de la fruta o Mosca del Mediterráneo en la comuna de Calle Larga (provincia de Los Andes, región de Valparaíso) a comienzos de junio puso en operación inmediata un plan de emergencia por parte del SAG, estableciendo un área cuarentenaria para controlar esta plaga, requisito fundamental para acceder a los mercados externos. Esta situación ha provocado inquietud en los productores de la zona, ya que están entrando a la temporada de cítricos y paltas.
Las exportaciones de fruta industrializada, en general, experimentaron una disminución en su volumen durante los primeros cinco meses de 2009 en comparación al mismo período de 2008. Las conservas de fruta muestran la mayor caída (30,7%), seguidas por las compotas (26,3%) y la fruta congelada (12,8%). Sin embargo, los deshidratados, el subsector más importante de la fruta industrializada en cuanto a valor de las exportaciones, tuvieron un crecimiento de 4,8% en el período comparado.
Entre los precios FOB medios de fruta industrializada que más aumentaron están los de manzanas deshidratadas (38,4%), aceite de oliva (36%), frambuesas congeladas (19,7%) y jugo de uva (12%). Disminuyeron sus precios, entre otros productos, las moras congeladas (35,7%), las frutillas congeladas (15,3%) y las conservas de cerezas (8,8%).
Vinos
Silvio Banfi Piazza
El volumen total de las exportaciones de vinos y mostos de mayo de 2009 aumentó 21,8% respecto al del mismo mes del año anterior, llegando en esta oportunidad a 57,5 millones de litros. El valor total disminuyó 6,2%, alcanzando a US$ 113,5 millones. El precio promedio disminuyó 23%, situándose en US$ 1,97 por litro.
En términos acumulados, se aprecia que durante los primeros cinco meses de 2009 el volumen total de estas exportaciones ha aumentado 3,5%, alcanzando a 248,1 millones de litros. El valor total presenta una disminución de 7,5% y muestra casi US$40 millones menos que en igual período del año anterior. La baja del precio promedio en este caso ha sido de 10,6%, ubicándose en US$ 2,01 por litro.
Lo anterior seguramente ha sido consecuencia de los ajustes realizados por el sector vitivinícola exportador para adecuarse a las condiciones comerciales imperantes en los principales mercados de destino, después de la crisis financiera internacional. Ello se ha visto facillitado por los bajos precios que tuvo en esta temporada la uva para vinificación, como consecuencia de la situación de abundante oferta observada en la última vendimia nacional.
Al analizar más detalladamente el comportamiento de estas exportaciones, se observa que tanto la categoría de vinos embotellados (con denominación de origen) como la de vinos a granel (sin denominación de origen) y la de los demás vinos envasados (en general sin denominación de origen y en envases diferentes a botellas) presentan incrementos del orden de 3 millones de litros cada una. Sin embargo, debido a la diferente importancia relativa que tienen individualmente, los incrementos respecto al mismo período del año pasado corresponden a 3%, aproximadamente, en los casos de las dos primeras, y a 21%, en el de la última. Esto significa que en este año se están exportando proporcionalmente más vinos en envases de cartón (Tetra Pack) y plástico (Pet) que en el año anterior y que, a pesar del aumento de volumen de las otras dos categorías, sus participaciones sobre el total han tendido a disminuir.
Respecto a los valores, se observa disminución sólo en los vinos embotellados (10,4%), en tanto que los vinos a granel y los demás vinos envasados presentan incrementos de 0,8% y 18,9%, respectivamente. Los precios se reducen para todas las categorías, con variaciones de -13,2% para los vinos embotellados, -2,2% para los vinos a granel y -1,7% para los demás vinos envasados.
Los vinos espumosos han mostrado una evolución completamente diferente, ya que se aprecia una disminución de 28,3% en el volumen exportado durante enero-mayo. Aunque su valor también ha bajado, sólo lo ha hecho en 4,3%, pues su precio medio ha aumentado 33,4%, alcanzando en este período a US$ 4,3 por litro.
En relación a la vendimia 2009, que ya se encuentra completamente finalizada, se está a la espera de las cifras oficiales que entregará el SAG durante la primera quincena de julio, una vez cerrado el período de ajustes o correcciones de las declaraciones realizadas por las empresas, el que se extiende hasta el 30 de junio.
Por ahora las expectativas son inciertas, considerando que, por una parte, principalmente a través de las organizaciones gremiales, se ha sostenido que en este año se obtendría una producción mayor que la del año anterior (868 millones de litros). No obstante, informes provenientes de regiones, en particular de la Región del Bío Bío, afirman que, además del adelanto detectado en este año en la cosecha de uva, se ha notado una importante merma en los rendimientos, debido a los efectos que produjo la sequía de primavera y verano sobre la productividad de los viñedos de la zona.
Persiste la debilidad de precios observada en el mercado nacional desde comienzos del año. Se aprecian sólo pequeños repuntes d
urante mayo, respecto a abril, en vinos como Semillón y Chardonnay, especialmente en las calidades más elevadas, pero todavía manteniéndose en niveles similares a los de comienzos de año. El resto de las variedades, tanto tintas como blancas, en sus diferentes calidades, mantienen una evolución bastante pareja durante el año 2009, sin manifestar indicios de recuperación.
Exportaciones chilenas de miel a mayo de 2009
Daniel Barrera Pedraza
Según cifras del Servicio Nacional de Aduanas, hasta mayo del año 2009 las exportaciones chilenas de miel totalizaron 7.432 toneladas, avaluadas en cerca de US$ 21,5 millones, lo que representa un crecimiento de 30,8% en valor y 23% en volumen, respecto al mismo período de 2008. El precio unitario fue de US$ 2,9 por kilo.
El principal destino sigue siendo Alemania, con 80% de participación de mercado y un precio unitario de US$ 2,87/kg. En segundo lugar se posiciona el Reino Unido, con el 10,1% y un precio de US$ 3,07/kg. Francia aparece en el tercer lugar, con el 4,9% y un precio de US$ 2,7/kg.
Bovinos
Verónica Echavarri Vesperinas
Respecto a la comercialización de ganado bovino en las ferias ganaderas, la asociación gremial respectiva informa que hasta el mes de mayo se habían transado 350.418 animales, lo que corresponde a una disminución de 10% respecto al volumen transado en igual período del año 2008. Esta disminución se da en todas las categorías, a excepción de las vacas carnaza, que aumentan en 3.459 animales.
El precio promedio acumulado pagado por los bovinos de todas las categorías al mes de mayo de 2009 es más alto que el de mayo de 2008. Este aumento va desde un 7,1% en el precio de las vacas gordas a un 14% en el de las terneras. En el caso de los novillos, las variaciones al alza que se habían dado en los meses de febrero, marzo y abril se revirtieron en el mes de mayo, dando como promedio un precio de $ 735 para el novillo gordo y $ 628 en el caso de novillo para engorda.
Las importaciones de carne bovina acumuladas al mes de mayo han aumentado en 28% en volumen y su precio promedio por kilo es 19,2% más bajo que el de igual período de 2008. Los incrementos de volumen están dados por las importaciones desde Paraguay y Argentina, que representan 64,3% y 31,9% del total importado, respectivamente. Estas importaciones tuvieron un máximo en los meses de marzo y abril, cuando superaron las 10.000 toneladas.
Las exportaciones presentan una disminución de 9,8% en volumen y 14% en valor, cuando se compara el período enero-mayo de 2009 con el de 2008. El volumen total de 1.591 toneladas tiene como destinos principales Alemania, México, Cuba y Estados Unidos. Si bien en bajos volúmenes, llama la atención el valor de las exportaciones de carne deshuesada congelada realizadas a Venezuela, las cuales se producen en el mes de abril a un promedio de US$ 11,2 por kilo, precio que sube a US$ 37,2 en el mes de mayo.
Leche: importaciones en los primeros cinco meses de 2009
Víctor M. Esnaola Lewis
Durante los primeros cinco meses de 2009 el valor total de las importaciones de lácteos disminuyó en 38%, llegando a un total de US$ 22,7 millones de dólares. Esto se debió en parte a la fuerte baja en los precios internacionales, que mostraron una reducción de 37% en promedio. Por ejemplo, el precio medio de la leche en polvo entera fue de US$ 2.110 por tonelada CIF, en circunstancias que en el año 2008 llegó a US$ 4.693 por tonelada, lo que significa una baja de 53,2%. En este mismo período, los precios de importación de la leche descremada mostraron una caída de 37,4% respecto del valor entre enero y mayo de 2008, registrando un valor medio de US$ 2.239 por tonelada.
Entre enero y mayo de 2009, el volumen total de importación de leches en polvo tuvo una disminución de 9,3%. Datos de las importaciones de leche descremada hasta mayo indican que se aproximaron a 2.330 toneladas (-25%), mientras que las de leche entera, si bien subieron a casi el triple, sólo alcanzaron un volumen de 638 toneladas.
Los quesos aumentaron sus importaciones en 9,7%, llegando a 2.960 toneladas hasta mayo y registrando una fuerte caída de sus precios, que alcanzaron un valor promedio de US$ 3.356 por tonelada. Éste debe compararse con el de igual período de 2008, que fue de US$ 4.708 (-29,2%).
Llama la atención que las importaciones de leches en polvo y quesos al país se dan en un escenario de altos stocks de estos productos a nivel de las industrias locales.
Productos como yogur, sueros en polvo, leches fluidas UHT y manjar registran caídas en sus importaciones.
El caso del yogur se debe a la reducción de las importaciones de la empresa Danone, que puso en funcionamiento su planta en Chillán. Además, en el primer cuatrimestre de 2009 el rubro en general presentó un aumento de 2,8% en la producción interna del conjunto de las industrias nacionales.
Expresadas las cifras de importaciones de lácteos en litros de leche equivalentes, en el período enero-mayo de 2009 se observa una baja de 5,2% en relación a las importaciones de igual período de 2008. Las exportaciones también se reducen (a 153,2 millones de litros), aunque en una proporción mayor (11,3%). No obstante, el balance continúa siendo positivo, aunque es el menor de los últimos tres años (83,8 millones de litros) e inferior en casi 16% al de los primeros cinco meses de 2008.
En cuanto al origen de los lácteos importados, Argentina continuó siendo el principal proveedor, con 61% del valor total. En segundo lugar apareció Uruguay, con una participación de 14,4%, seguido de EE.UU., con 7,8%. Más atrás se ubicaron Brasil, Perú y Nueva Zelanda, totalizando entre los seis principales orígenes casi 96% del valor total de las importaciones.
Nuevas regulaciones canadienses para la producción orgánica
Pilar Eguillor Recabarren
El 30 de junio de 2009 entran en vigencia las nuevas regulaciones canadienses para la producción orgánica.
El mercado total de productos orgánicos en Canadá varía entre $2.100 y 2.600 millones de dólares de EE.UU. y más de 80% de los productos orgánicos que se consumen en ese país son importados. Sin embargo, este mercado se encuentra regulado desde 1999 sólo a través de normas voluntarias, las que se conocen como National Standard of Canada for Organic Agriculture. A partir de 2009 esta situación cambiará radicalmente con la entrada en vigencia de nuevas regulaciones de carácter obligatorio denominadas Organic Products Regulations (OPR), las cuales establecen la certificación obligatoria tanto para los productos orgánicos nacionales como para los importados.
Es así como, a partir de junio de 2009, el sector orgánico estará regulado a través del Régimen Orgánico de Canadá (Canadian Organic Regime, COR) y de los Sistemas de Producción Orgánicos, los cuales contienen los Principios Generales de Producción y las Normas de Manejo (CAN/CGSB32.310) así como las Listas de Sustancias Permitidas (CAN/CGSB 32.311). Estas regulaciones, por el momento, se aplicarán solamente a los alimentos de origen vegetal y animal, al forraje y a los insumos usados en la producción orgánica. Las normas, publicadas el 14 de febrero de 2009, son la respuesta del gobierno a las peticiones de grupos interesados en desarrollar un sistema regulatorio oficial para enfrentar los temas de protección al consumidor y regular el acceso de los productos orgánicos a los mercados doméstico e internacional.
El Régimen Orgánico de Canadá (COR) se basa en el modelo de entrega de servicio de tercera parte. De este modo, la Agencia Canadiense de Inspección de los Alimentos (Canadian Food Inspection Agency, CFIA) será la autoridad competente a cargo del control del sistema y las entidades de acreditación, ahora denominadas como Entidades Verificadoras de la Conformidad (Conformity Verification Bodies, CVB), firmarán acuerdos con la CFI
A, una vez que demuestren cumplir con los criterios definidos por el COR. Los CVB, a su vez, evaluarán a las empresas certificadoras para determinar si cumplen con los criterios establecidos y así recomendar que sean acreditados por la CFIA. La verificación de los sistemas de producción orgánica y de los predios será realizada por inspectores de tercera parte contratados por las empresas certificadoras acreditadas. Las actividades de verificación del cumplimiento y aplicación de las regulaciones serán realizadas por la CFIA.
La Agencia Canadiense de Inspección de los Alimentos introducirá un solo logo para identificar productos orgánicos: «Canada Organic» / «Biologique Canada», que podrá ser usado en forma voluntaria en los productos certificados que tengan un contenido orgánico igual o superior a 95%. El uso del logo indicará a los consumidores que el producto se ha certificado cumpliendo con el estándar canadiense. Las empresas certificadoras, por su parte, serán identificadas en el envase del producto de acuerdo a lo estipulado en las regulaciones.
Importaciones y exportaciones
Según las nuevas regulaciones, los productos orgánicos que entren a Canadá deberán cumplir los siguientes requisitos de importación:
- Estar certificados como orgánicos de acuerdo a los estándares canadienses;
- Estar certificados como orgánicos en el marco de un acuerdo firmado con el país de origen, respecto a la importación y a la exportación de productos orgánicos, y
- Estar certificados como orgánicos por una empresa certificadora reconocida por el país de origen, en el marco de un acuerdo.
Todos los importadores de productos orgánicos deben poder demostrar que los productos cumplen con los requisitos de importación y toda la documentación será verificada por inspectores de la CFIA. La negociación de aceptación por parte del COR de sus socios comerciales es responsabilidad del Gobierno de Canadá, para lo cual éste ha solicitado a la Oficina de Estándares Generales Canadienses (Canadian General Standards Board, CGSB) y al Comité Técnico para la Agricultura Orgánica (Technical Committee for Organic Agriculture) evaluar las diferencias existentes entre las distintas normativas con el fin de decidir sobre su equivalencia. A la fecha la documentación para el reconocimiento del Sistema Canadiense ya ha sido preparada e intercambiada con la Unión Europea, los EE.UU. y Japón, y con fecha 17 de junio de 2009 se logró la primera equivalencia con el National Organic Program de los EE.UU. Cabe señalar que las regulaciones canadienses tomaron en consideración los requisitos de las normativas orgánicas de sus socios comerciales más importantes (UE, EE.UU. y Japón), con el fin de estar en armonía con éstos.
Los productos orgánicos para exportación desde Canadá a otros mercados deben cumplir con los requisitos del país importador. En el caso de que estos productos no cumplan con las regulaciones canadienses, no podrán ser comercializados en Canadá y no podrán llevar el logo oficial. El reingreso de estos productos a Canadá, como productos orgánicos, está prohibido.
Frente a este escenario, Chile deberá analizar las repercusiones de la entrada en vigencia de las nuevas regulaciones canadienses en el sector orgánico nacional y evaluar la necesidad de lograr un acuerdo de reconocimiento del Sistema Nacional de Certificación de Productos Orgánicos Agrícolas (Ley 20.089).
Comercialización de productos orgánicos producidos antes y después del 30 de junio de 2009
Muchos productos orgánicos en Canadá (domésticos e importados) se certifican en la actualidad en forma voluntaria. Bajo las nuevas regulaciones, estas certificaciones seguirían siendo válidas sólo si la empresa certificadora es acreditada por una Entidad Verificadora de la Conformidad (CVB) reconocida por la CFIA. Si la certificación no es válida bajo estas condiciones, se otorgará un tiempo adicional de ajuste a los operadores orgánicos, de modo que puedan adaptar sus sistemas al esquema obligatorio, ya que la CFIA reconoce que algunos operadores necesitarán tiempo para hacer los cambios necesarios para cumplir con los nuevos requisitos. De esta manera, la Agencia ha desarrollado una Política de Implementación y Cumplimiento de las Regulaciones para no impedir el comercio orgánico después de la entrada en vigencia de las regulaciones, asegurando al mismo tiempo el control y proporcionando la protección a los consumidores. Por lo tanto, los productos producidos, vendidos, etiquetados o presentados como orgánicos antes del 30 de junio de 2009, estarán bajo la Política de Implementación y Cumplimiento durante dos años y el operador orgánico será notificado de que tiene este plazo para cumplir con las nuevas regulaciones. Bajo ninguna circunstancia estos productos podrán llevar el logo orgánico. Esta Política se aplicará de igual forma a los productos domésticos y a los importados. A partir del 30 de junio de 2009 y hasta el 30 de junio de 2011, a los operadores de productos orgánicos certificados que no cumplan los nuevos estándares orgánicos canadienses o que estén certificados a través de una empresa certificadora no acreditada por la CFIA, se les solicitará corregir las infracciones y proporcionar a la Agencia Canadiense de Inspección de los Alimentos un plan con las acciones correctivas que aplicarán.