Categorías: Noticias institucionales
Contactos en materias de innovación tecnológica con agencias de cooperación de la Unión Europea e importantes reuniones, que significarán negocios a futuro para los pequeños agricultores asociados a las redes de berries y hortofrutícolas, fueron los principales resultados de la participación de Indap en la feria de SIFEL 2003, Francia.
La delegación, compuesta por el subdirector nacional del Instituto, Arturo Sáez; Marcos Montagna, encargado de las redes pro rubros de Indap; el productor Ariel Guerra, presidente de la red de berries, y el productor Dagoberto Urzúa, presidente de la red hortofrutícola.
En París el grupo fue recibido por el embajador de Chile en ese país, Marcelo Schilling, quien se mostró muy interesado en la tarea que desarrolla INDAP en favor de los pequeños agricultores. Asimismo, aprovechó de efectuarle contactos a la delegación, con el fin de que desarrollaran lo mejor posible su labor en la nación gala.
Durante la visita el grupo recorrió también el mercado mayorista agropecuario instalado en las afueras de París, el que concentra en 500 hectáreas todo tipo de productos.
Durante la feria de SIFEL 2003, que se efectuó en la provincia de Burdeos, se hizo un intenso lobby, que implicó tener cerca de 60 contactos, en cuatro días de trabajo, con distintas empresas europeas e instituciones del sector público francés.
En el campo de la innovación tecnológica también se exploró la posibilidad de introducir nuevas variedades de frambuesas, que son las que están siendo requeridas en la actualidad por el mercado europeo, así como variedades de ajos. El mercado europeo es cada vez más sofisticado. Exige innovación en colores, sabores y tamaños de frutas.
Durante la ronda de conversaciones se exploró la posibilidad de instalar nuevos viveros de frutillas y frambuesas en Chile, además de introducir una nueva variedad de ajos de origen mexicano. También se establecieron compromisos con delegaciones extranjeras, como la de Navarra, la que llegará este fin de mes a Chile.
La importancia de estos contactos redundan en beneficios para cerca de 6.200 campesinos, que componen estas redes, a quienes sus respectivos representantes les harán llegar la información. Está todo dado para que se puedan entregar productos de excelente calidad, en el marco del convenio con la Unión Europea, que es muy amplio. La SIFEL abrió las puertas para ir más allá en términos de capacitación, tecnología y oportunidades, las que tienen que ver con formas de pagos, entre otras cosas.
La proyección de estos contactos podrán operar para los pequeños agricultores a través de Euro Chile, agencia cuya tarea es facilitar este tipo de relaciones. Se está terminando de elaborar una agenda de cooperación entre los ministerios de Agricultura de Chile y Francia, en la cual hay un acuerdo marco, próximo a materializarse.
Referente a las exportaciones habrá que preocuparse de dar mayor énfasis a la calidad de los productos, a las formas de empaque, al manejo del frío y a la certificación de los productos.