Autor: Karina Causa Ureta
Categorías: Artículos,Asuntos internacionales,Comisión Nacional de la Leche,Leche y derivados
El sector lácteo chileno constituye una actividad estratégica para el desarrollo agroalimentario, con fuerte arraigo territorial, vocación exportadora y alto potencial para contribuir a la seguridad alimentaria y desarrollo sustentable. La exportación en el sector cumple un rol clave para diversificar la demanda y capturar valor en mercados exigentes, impulsando productividad, inversión y estándares sanitarios. Este artículo presenta la evolución del comercio exterior lácteo de Chile durante 2018–2024, su objetivo es describir y contextualizar el desempeño del sector en materia de exportaciones, importaciones y balanza comercial, incorporando además una mirada de diversificación de mercados con énfasis en Sudeste Asiático. Las cifras reportadas han sido obtenidas a partir de datos oficiales del Servicio Nacional de Aduanas, complementados con publicaciones de Odepa, INE y Trademap.
La base productiva del sector se concentra en el sur del país, con cerca de 370.000 vacas lecheras, 82% ubicadas en las regiones de Los Lagos y Los Ríos, bajo sistemas pastoriles estacionales. El año 2024 el Centro de Información Láctea (CIL), conformado por el Consorcio Lechero, Fedeleche, Exporlac y Odepa, reportó que 2.317 productores abastecen de manera regular a la industria procesadora nacional[1].
Durante 2024, la recepción de leche cruda totalizó 2.404 millones de litros, con un crecimiento interanual de 2,8%, favorecido por mejores condiciones climáticas, estabilidad de precios y menores costos de insumos. El precio promedio pagado al productor cerró el año en $422 por litro, consolidando una tendencia positiva. En paralelo, las exportaciones lácteas alcanzaron USD 262 millones,15,6% superior al 2023, impulsadas por productos de alto valor agregado y la expansión en mercados como México, Brasil, Perú y Colombia.
Respecto al comercio exterior, el sector se caracteriza por presentar una balanza deficitaria, sin embargo, durante 2024 las exportaciones de productos lácteos totalizaron USD 262 millones, 15,6% por sobre 2023, destacándose leche condensada y quesos, y mayor dinamismo de los envíos a Estados Unidos y México. En paralelo, las importaciones disminuyeron 3,6% y mantuvieron una alta presencia de quesos provenientes de Argentina, Estados Unidos y Alemania, lo que contribuyó a la reducción del déficit comercial del sector.
Por otro lado, la disponibilidad aparente de lácteos en Chile bordea los 140 litros per cápita al año, por debajo de la recomendación de las Guías Alimentarias del Ministerio de Salud[2]. Esta brecha representa tanto un desafío como una oportunidad estratégica para fortalecer la articulación entre producción nacional y consumo interno.
El dinamismo del sector se ve respaldado por inversiones como la de Nestlé, que destinará USD 300 millones entre 2024 y 2026 para modernizar sus plantas en Chile. A nivel global, el año 2024 cerró con una recuperación moderada en la producción y un leve repunte en los precios internacionales, lo que configura un escenario favorable para la inserción de la oferta chilena.
En este marco, durante el año 2025 se realizará en Chile del IDF World Dairy Summit, principal cumbre mundial organizada por la Federación Internacional de Lechería (IDF/FIL) y que por primera vez tendrá lugar en América Latina. El encuentro convoca a más de mil representantes de más de 50 países (autoridades, industria, productores, academia y organismos internacionales) y abordará como ejes sistemas alimentarios sostenibles, inteligencia artificial, seguridad alimentaria y adaptación al cambio climático. Para el sector lácteo nacional, constituye una plataforma para proyectar internacionalmente los avances en calidad, inocuidad, trazabilidad y sostenibilidad, así como para fortalecer vínculos técnicos y comerciales con mercados exigentes, en coordinación con las instituciones del Ministerio de Agricultura.
[1] Datos correspondientes al reporte de productores de la Encuesta Láctea Mayor (Odepa) y Encuesta Láctea Menor (INE).
[2] Las Guías Alimentarias del Ministerio de Salud recomiendan un consumo diario de tres porciones de lácteos al día, siendo 200 cc de leche equivalente a una porción.