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Las altas temperaturas de los últimos días han mantenido en alerta a la CONAF en la Región de Aysén, ya que hacen aumentar la frecuencia de los incendios forestales y reducen las posibilidades de combatirlos efectivamente.
Debido a esto y a los últimos siniestros registrados, que incluso afectaron a la Reserva Nacional Coyhaique, el Director Regional de la CONAF, Jorge Burgos, anunció nuevamente la suspensión de todos los permisos y resoluciones para realizar quemas controladas en la Región de Aysén.
Esta medida está especialmente orientada al uso del fuego entre los campesinos, «por lo que se les solicita cumplir con esta suspensión y no realizar quemas de ningún tipo al interior de los predios, ya que cualquier presencia de fuego es ilegal y además se transforma en un riesgo, considerando el poco control que se puede ejercer sobre él debido a las condiciones climáticas y topográficas», señaló Burgos.
En caso de existir dudas con respecto a esta medida, la Corporación puso a disposición de los interesados los teléfonos: 212142 y 212144.
Además se hace un llamado a los turistas y veraneantes a abstenerse de utilizar fuego en sus actividades recreativas y, si éste fuere estrictamente necesario, preocuparse de apagarlo en su totalidad antes de dejar el lugar visitado, con el fin de proteger nuestro patrimonio forestal.
Medidas tan simples como no tirar colillas de cigarrillos por las ventanillas de los automóviles; no dejar botellas de vidrio, que al sol provocan un efecto de lupa que provoca fuego, y no realizar fogatas, pueden contribuir a mantener los bosques de la Región. Cabe recordar que la mayoría de los incendios forestales son provocados por la acción del hombre y, por lo tanto, son evitables.
