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Carlos Furche, Director de la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (ODEPA), informó que el consumo aparente de carnes durante 2001 fue de 70,1 kilos por habitante. La disponibilidad total de carnes del país durante el año pasado fue de 1.083.906 toneladas.
El directivo dijo que una vez más nuestro país, continuando con la expansión en el consumo de carnes de los últimos años, alcanzó el nivel máximo de consumo. Con esto superó ampliamente el consumo estimado a nivel mundial por la FAO para 2001, que fue de 38,7 Kg/h, acercándose al promedio de los países desarrollados.
Durante 2001 el consumo aparente de carne bovina fue de 21,4 kilos por habitante; ovina, 0,4 Kg/h; porcina, 18 Kg/h; aves, 29,6 Kg/h, y otras, 0,7 Kg/h.
Comparado con 2000, en 2001 aumentó el consumo aparente de carne de ave (7,5%) y porcina (9,9%), y disminuyó el consumo aparente de carne bovina (-1,7%) y ovina
(-19%).
Furche agregó que el consumo de carnes blancas ha crecido en forma paulatina en los últimos 15 años. Desde 1997 la carne de ave ha superado a la carne bovina.